top of page
Buscar
  • Patricia Murphy Doyle

INTELIGENCIA EMOCIONAL: UNA FORMA DISTINTA DE SER INTELIGENTE...



Daniel Goleman define la inteligencia emocional como “la capacidad para reconocer y manejar nuestros propios sentimientos, motivarnos y monitorear nuestras relaciones”.

Esto significa entender lo que sentimos y aprender a gestionarlo para que nos lleve a los resultados deseados.


La inteligencia emocional se aprende y se puede potenciar, sólo depende de nosotros, es un trabajo personal que engloba cinco dimensiones básicas:


• Autoconciencia emocional

Es nuestra capacidad para entender lo que sentimos y de estar siempre conectados con nuestros valores, es decir, se refiere a nuestra esencia.

Es importante reconocer cómo nuestros sentimientos y valores nos afectan, y esto influirá en la forma de interactuar con los demás.


• Autocontrol

Es la habilidad para tener control sobre uno mismo y sus acciones, bajo el dominio del cuerpo, consiste en no dejarse llevar por los sentimientos del momento.


• Automotivación

Es la habilidad para orientarnos a nuestras metas, de focalizar todos nuestros recursos para poder cumplirlas, superando cualquier obstáculo.

Se pone especialmente a prueba cuando surgen las dificultades, el cansancio, los temores, es el momento en que mantener el pensamiento de que las cosas irán bien, puede significar el éxito o el fracaso.


• Empatía

Es la capacidad cognitiva de percibir lo que sienten los demás, significa “ponerse en los zapatos del otro”. Reconocer las emociones ajenas, aquello que los demás sienten y captar sus mensajes tanto verbales como no verbales.


• Habilidades sociales

Al relacionarnos con los demás estamos emitiendo señales emocionales que afectan a los que nos rodean. Las emociones son “contagiosas” como un virus, tanto las positivas como la alegría o una negativa como la ira.



Estas habilidades son necesarias para tener relaciones familiares, de pareja y de amistad más satisfactorias y construir entornos laborales sanos, cómodos y más productivos.


La vida laboral en general tiene una serie de estresores psicosociales que, a veces, pueden ocasionar conflictos emocionales por la existencia de, por ejemplo, demandas no razonables o la incapacidad de seguir el ritmo de trabajo.


Las personas con una mayor capacidad de gestionar sus emociones tienen más oportunidades y más éxito en el ámbito profesional.


Los beneficios de la inteligencia emocional:

• Nos ayuda a controlar mejor nuestros estados de ánimo

• A salir más rápidamente de espirales destructivas

• A mejorar nuestra relación con nosotros mismos y, por tanto, con los demás


Algunos de los consejos de Daniel Goleman son:

· Detectar la emoción que hay detrás de cada uno de nuestros actos

· Ampliar nuestro lenguaje emocional

· Controlar lo que pensamos para controlar cómo nos comportamos

· Buscar un por qué al comportamiento de los demás

· Expresar nuestras emociones de forma asertiva

· Mejorar nuestras habilidades sociales

· Aprender a automotivarnos


Tengamos en cuenta estos pequeños trucos que nos pueden ayudar en momentos de mucho estrés:

• Identificar el momento en que comienza el estrés

• Reconocer todas las expresiones que ese estado nos produce

• Aplicar técnicas de respiración

• Desviar la atención

• Mirar una imagen relajante

• Adoptar una postura física antiestrés

• Hacer un ejercicio simple con las manos


"No es el estrés lo que nos mata, sino cómo reaccionamos ante él” Hans Selye.

bottom of page